"Barcelona nació un poco de la desesperación de un grupo de gente que se conocía de laburos anteriores, que se llevaba bien y que se juntaba para reirse leyendo otros medios. En un momento nos quedamos sin laburo todos, y armamos una parodia de un diario que es la suma de todos los diarios, pero con muchos tics de "El Gran Diario Argentino" (Clarín)", contó Lucano.
Además, confesó: "No hacemos guita. Cubrimos los gastos y lloramos pautas de publicidad, pero sin correr una coma de lugar. Lo que queríamos hacer era algo profesional, aunque fuese una cosa desquiciada".
Y concluyó: "Por una cuestión de costos usamos dos colores, y los hacemos rotativos según los colores primarios de las imprentas. Eso, en algún punto, funciona como parodia gráfica de un medio".